En 2009 por primera vez padecieron hambre y desnutrición más de 1.000 millones de personas en todo el mundo
Los precios del trigo cayeron gracias al aumento de las reservas y al incremento de la producción en todo el mundo, informó hoy la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en sus perspectivas semestrales "Food Outlook" sobre la producción de cereales.
"Las terribles subidas de precio en los años 2008 y 2009 han impulsado el cultivo y la producción en muchos países, lo que ha posibilitado, a su vez, un aumento de las existencias", señala el informe respecto al "boom" del cereal. El documento apunta a que esa tendencia se mantendrá también en 2011.
Los alimentos básicos no elaborados a partir de cereales continúan, sin embargo, siendo caros, sobre todo en los países en vías de desarrollo, señaló la FAO.
A pesar de la caída del precio de los cereales y del azúcar, los gastos de los países más pobres derivados de las importaciones de alimentos continuarán subiendo.
Según las estimaciones de la FAO, los costes que acarrearán las importaciones de alimentos ascenderán este año a 100,000 millones de dólares (81,200 millones de euros).
Aunque se trata de un importe inferior al del año 2008, cuando la crisis de los alimentos alcanzó su momento más crítico, sobrepasa en un 11 por ciento la cuantía de 2009. Los productos que más están contribuyendo al alza de precios son los lácteos, los aceites vegetales, el pescado y los cárnicos.
En 2009 por primera vez padecieron hambre y desnutrición más de 1.000 millones de personas en todo el mundo.
Durante una "conferencia alimentaria" de la FAO de tres días celebrada en noviembre de 2009, representantes de 192 países miembros elaboraron un plan de actuación contra el hambre, basado en cinco puntos.
En dicho documento se subrayaron sobre todo los Objetivos del Milenio formulados en el año 2000, en los que Naciones Unidas se comprometía a reducir el hambre a la mitad antes de 2015.
Sin embargo, la declaración final fue objeto críticas por su falta de concreción.
fuente: Agencias - Andina
"Las terribles subidas de precio en los años 2008 y 2009 han impulsado el cultivo y la producción en muchos países, lo que ha posibilitado, a su vez, un aumento de las existencias", señala el informe respecto al "boom" del cereal. El documento apunta a que esa tendencia se mantendrá también en 2011.
Los alimentos básicos no elaborados a partir de cereales continúan, sin embargo, siendo caros, sobre todo en los países en vías de desarrollo, señaló la FAO.
A pesar de la caída del precio de los cereales y del azúcar, los gastos de los países más pobres derivados de las importaciones de alimentos continuarán subiendo.
Según las estimaciones de la FAO, los costes que acarrearán las importaciones de alimentos ascenderán este año a 100,000 millones de dólares (81,200 millones de euros).
Aunque se trata de un importe inferior al del año 2008, cuando la crisis de los alimentos alcanzó su momento más crítico, sobrepasa en un 11 por ciento la cuantía de 2009. Los productos que más están contribuyendo al alza de precios son los lácteos, los aceites vegetales, el pescado y los cárnicos.
En 2009 por primera vez padecieron hambre y desnutrición más de 1.000 millones de personas en todo el mundo.
Durante una "conferencia alimentaria" de la FAO de tres días celebrada en noviembre de 2009, representantes de 192 países miembros elaboraron un plan de actuación contra el hambre, basado en cinco puntos.
En dicho documento se subrayaron sobre todo los Objetivos del Milenio formulados en el año 2000, en los que Naciones Unidas se comprometía a reducir el hambre a la mitad antes de 2015.
Sin embargo, la declaración final fue objeto críticas por su falta de concreción.
fuente: Agencias - Andina
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